Hace 72 años llegó la Santísima Virgen del Amparo a nuestra Hermandad. Llegaba para calmar el dolor y el sufrimiento tras la explosión que había asolado la ciudad. Hoy volvemos a necesitar de su constante protección, de su constante Amparo. A Ella nos encomendamos con toda nuestra fe, con una oración más antigua que dice:
Bajo tu amparo nos acogemos,
santa Madre de Dios;
no deseches las oraciones
que te dirigimos
en nuestras necesidades,
antes bien
líbranos de todo peligro,
¡oh Virgen gloriosa y bendita!
Amén.
Hace 72 años llegó para ser el Amparo de Cádiz.